Como bien sabemos los extractores nos ayudan a eliminar el humo, los olores, la grasa en suspensión en el aire de nuestras cocinas. En la actualidad podemos encontrar tres tipos de extractores en el mercado, todos estos con usos domésticos:
El primero:
Los extractores tipo Plano, son utilizados mayormente en ambientes más cerrados, ya que no requieren un ducto de salida, debido a que estos vienen con filtros de carbón que ayudan a purificar el aire. Con tres niveles de velocidad, están diseñados perfectamente para implementarlos en tu cocina. La instalación de estos modelos no requiere de mucho trabajo, siempre y cuando tengas el espacio ya definido.
Segundo:
Extractores tipo campana; este tipo de modelos suelen ocupar un poco más de espacio sobre todo en la parte superior. Sin embargo el trabajo de estos modelos suelen ser más eficientes, vienen con filtros metálicos lavables, luces led más sofisticadas, incluso ahora en algunos modelos la parte frontal vienen de vitrocerámica, haciendo que su panel de programas sea completamente digital, además de otras funciones. La instalación de estos modelos requiere de más apoyo, ya que normalmente vienen de grandes tamaños.
Tercero:
Extractores tipo Isla, este tipo de modelos, son utilizados sobre todo en las llamadas “cocinas americanas”, ya que son específicamente instalados al techo de la cocina y no de una pared, como anteriormente habíamos visto. Vienen con paneles laterales, luces en ambos lados y son más atractivos a simple vista. La instalación de estos modelos requiere de más tiempo, y normalmente siempre suele tener un costo adicional.
De acuerdo al espacio y la comodidad podrías definir el extractor ideal para tu cocina, por ejemplo si vives en un departamento pequeño evita escoger un modelo Tipo isla, ya que te ocuparía mucho espacio y normalmente los departamentos tienen otro tipo de diseño. Lo más aconsejable es que optes por un modelo Tipo campana o uno tipo Plano ya que por sus características son los ideales para esos ambientes.